El equipo de Sir Alex Ferguson volvió a ganar después de dos empates consecutivos (había igualado con el Everton por la Premier y con el Rangers de Escocia por la Champions League) y quedó tercero con 11 unidades, a cuatro del Chelsea que con cinco fechas jugadas tiene puntaje ideal.
En un partido parejo, que se jugó en Old Trafford, el Manchester United y el Liverpool jugaron con tácticas similares desde lo numérico. Ambos utilizaron un 4-4-2. La diferencia estuvo en cómo se movieron los jugadores en la cancha. El esquema del local fue mucho más rígido que el del Liverpool. Nani, por derecha, y Ryan Giggas, por izquierda, se movieron siempre por sus bandas, sorprendiendo en algunas jugadas al hacer la diagonal. Sobre todo el portugués que en general pisa más el área que el veterano galés. Lo mismo pasó con Paul Scholes y Darren Fletcher, los dos volantes interiores del United. Jugaron siempre por el centro del campo, buscando asistir a Rooney y Berbatov, que marcó los tres goles de su equipo (fue su primer hat-trick en el Manchester).
En el Liverpool, el único delantero de área fue el español Fernando Torres. Aunque en la previa se anunciaba a Joe Cole cómo su compañero en ataque, el ex Chelsea se movió siempre unos metros más atrás, arrancando por la izquierda, y en varias oportunidades intercambió posiciones con Raúl Meirelles, que hizo su debut en la Premier y jugó al lado del capitán Steven Gerrard, que convirtió los dos goles de su equipo, en la mitad de la cancha. En muchos pasajes del partido el equipo quedó con un 4-4-1-1. Un sistema más flexible el que propuso Roy Hodgson, aunque también tuvo por derecha a Maxi Rodríguez en un lugar muy parecido al de Nani, siempre con el Niño Torres cómo referencia.
Más allá de lo táctico, el partido tuvo su primera emoción a los 42 minutos del primer tiempo. Berbatov puso en ventaja al Manchester, de cabeza. En el comienzo de la segunda mitad, otra vez el búlgaro aumentó la cuenta, de chilena. Cuando el United jugaba mejor y el partido corría peligro de entrar en una meseta, Gerrard en siete minutos lo empató. Y cuando faltaban seis minutos, otra vez Berbatov consiguió marcar el tercero y le dio la victoria a su equipo. 3 a 2 fue el resultado final que dejó al Manchester tercero, con 11 puntos, a cuatro puntos del Chelsea y al Liverpool, con 5 unidades, en la posición 16.
En un partido parejo, que se jugó en Old Trafford, el Manchester United y el Liverpool jugaron con tácticas similares desde lo numérico. Ambos utilizaron un 4-4-2. La diferencia estuvo en cómo se movieron los jugadores en la cancha. El esquema del local fue mucho más rígido que el del Liverpool. Nani, por derecha, y Ryan Giggas, por izquierda, se movieron siempre por sus bandas, sorprendiendo en algunas jugadas al hacer la diagonal. Sobre todo el portugués que en general pisa más el área que el veterano galés. Lo mismo pasó con Paul Scholes y Darren Fletcher, los dos volantes interiores del United. Jugaron siempre por el centro del campo, buscando asistir a Rooney y Berbatov, que marcó los tres goles de su equipo (fue su primer hat-trick en el Manchester).En el Liverpool, el único delantero de área fue el español Fernando Torres. Aunque en la previa se anunciaba a Joe Cole cómo su compañero en ataque, el ex Chelsea se movió siempre unos metros más atrás, arrancando por la izquierda, y en varias oportunidades intercambió posiciones con Raúl Meirelles, que hizo su debut en la Premier y jugó al lado del capitán Steven Gerrard, que convirtió los dos goles de su equipo, en la mitad de la cancha. En muchos pasajes del partido el equipo quedó con un 4-4-1-1. Un sistema más flexible el que propuso Roy Hodgson, aunque también tuvo por derecha a Maxi Rodríguez en un lugar muy parecido al de Nani, siempre con el Niño Torres cómo referencia.
Más allá de lo táctico, el partido tuvo su primera emoción a los 42 minutos del primer tiempo. Berbatov puso en ventaja al Manchester, de cabeza. En el comienzo de la segunda mitad, otra vez el búlgaro aumentó la cuenta, de chilena. Cuando el United jugaba mejor y el partido corría peligro de entrar en una meseta, Gerrard en siete minutos lo empató. Y cuando faltaban seis minutos, otra vez Berbatov consiguió marcar el tercero y le dio la victoria a su equipo. 3 a 2 fue el resultado final que dejó al Manchester tercero, con 11 puntos, a cuatro puntos del Chelsea y al Liverpool, con 5 unidades, en la posición 16.
Ficha del partido
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